Archivos para el mes de: febrero, 2012

Vaticina una leyenda maya que el 12-12-12 será el fin del mundo.  En todo caso, con una recesión económica y una  grave crisis financiera y social, los riesgos no escasearán.

Hace sólo 10 años entraba en circulación con euforia el euro, moneda soñada en París, concebida en Bruselas y acuñada en Frankfurt. Hoy, en 2012, todo son dudas y escepticismo entorno a la moneda única y a una Europa que prometía erigirse en el s.XXI en potencia económica y fuerza tractora de la innovación.

Y hace ahora 200 años que cristalizó en la España contemporánea el primer esfuerzo democrático, plasmado en la Constitución gaditana. Fue una época en la que se consideraba que “gobernar es prever”, como escribía el periodista francés del s. XIX, Émile Girardin.

¿Hemos perdido hoy la perspectiva, la capacidad de previsión?

Lo cierto es que ante esta crisis estructural, que remueve los fundamentos de la democracia, hay que aplicar soluciones distintas. Hace falta desaprender patrones mentales obsoletos. El primer patrón a olvidar es el de pretender más recursos. Hay que buscar mejorar y superar los modelos de gestión caducos cambiando la forma de hacer y aprovechando los recursos existentes. Por lo tanto, sobre todo necesitamos innovadores cuyo ADN, descodificado por dos profesores de Harvard, consiste en lo que denominan pensamiento asociativo. Eso significa que los buenos innovadores asocian ideas aparentemente inconexas. Hoy ya no vale pensar y hacer mejor, ni más, ni más rápido, sino diferente.

Necesitamos educar a nuestros niños y jóvenes para que utilicen su imaginación y sean capaces de concebir soluciones nuevas para los viejos problemas. Y, como afirma María Novo, Catedrática UNESCO de Educación Ambiental y Desarrollo Sostenible, es muy importante fomentar la resiliencia, esa capacidad de utilizar a nuestro favor circunstancias que nos vienen en contra, convirtiendo los retos en oportunidades.”

Los gobiernos deberán preocuparse por incentivar la innovación, el conocimiento, la internacionalización y la sostenibilidad, pero no deben ser los abanderados en descubrir las oportunidades empresariales y los sectores en los que invertir; de eso, deben encargarse los emprendedores, amparados y apoyados por modelos como los parques científicos y los cluster. Modelos, que se erigen en los verdaderos actores para la transferencia del conocimiento entre la academia y el mercado.

¿Pero, cómo podemos romper la compartimentación entre sectores económicos y la distancia galáctica entre universidad y empresas? Sirvan de ejemplo dos casos de éxito que se cuentan entre las ocho mejores ideas innovadoras del mundo.

Uno de ellos es Singapur, que invierte en capital humano, en la educación de sus habitantes como estrategia de futuro. Si en 1960 tenían una renta per cápita similar a la de Jamaica, hoy prácticamente la han multiplicado por diez. Si Jamaica centraba sus esfuerzos en el turismo, Singapur se convertía en un núcleo de investigación y negocios. El sistema educativo público allí es fuerte y aplica principios meritocráticos que consisten en identificar y apoyar a jóvenes talentos para futuros puestos de liderazgo. En los 60 Singapur atrajo capital extranjero para la industria para crear puestos de trabajo. Dado que se seguía invirtiendo en la educación de su capital humano, durante los años 70 el país empezaba a atraer industrias de valor añadido, como las petroquímicas, electrónicas y de almacenamiento de datos. Hoy son líderes en la industria del conocimiento, incluyendo las ciencias biomédicas.  Durante la pasada década, el número de científicos del territorio pasaba de 14,500 a 26,600.  La calidad de su enseñanza en matemáticas y ciencia es reconocida como la mayor del mundo según el último informe global de competitividad del Foro Económico Mundial.

Otro ejemplo es el Reino Unido, cuyas universidades están entre la élite mundial en investigación científica. Para reforzar esta posición aventajada, el gobierno británico ha invertido en tres consejos de investigación de ingeniería y ciencias físicas. Su objetivo es activar la colaboración entre investigadores e  industria para innovar especialmente en medicina regenerativa y tecnología médica. En 2009 constituyó el Fondo de Inversión en Innovación para apoyar empresas de base tecnológica, sobre todo en los campos de tecnología limpia y ciencias de la vida y la salud. El gobierno espera atraer capital del sector privado y crear, en un futuro, el fondo de tecnología más grande de Europa. 

Para volver a crecer pese al espectro de la distropía (lugar lleno de dificultades y sin esperanza)  y de los recortes hacen falta remedios diferentes. En los próximos meses, sin embargo, más vale hacer caso a Bette Davis, quien avisó en Eva al desnudo: “Abróchense los cinturones, este año va a ser movidito”.

Dícese de la resiliencia que es esa capacidad de utilizar a nuestro favor circunstancias que nos vienen en contra, convirtiendo los retos en oportunidades.

Islandia se ha convertido en un verdadero ejemplo de resiliencia. Sus ciudadanos se movilizaron en 2008 contra un gobierno corrupto y parásito. Se empezó a redactar una nueva Constitución hecha por ellos y para ellos. Y hoy, gracias a la movilización, será el país más próspero de un occidente sometido a una tenaz crisis de la deuda. Gracias a la fuerza de toda una nación lograron convertir la crisis en oportunidad.

La historia de Islandia es una de las más buenas noticias de los tiempos que corren. Sobre todo después de saber que según las previsiones de la Comisión Europea, este país del norte atlántico, cerrará el 2011 con un crecimiento del 2,1% y que en 2012, este crecimiento será del 1,5%, una cifra que supera el triple que la de los países de la zona euro. Más info